Días feriados: ¿Qué hacer si tu jefe te obliga a laborar el martes 16 de septiembre?
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El martes 16 de septiembre es una fecha sagrada en México: no solo por la celebración del Grito de Independencia, sino porque está reconocido por la ley como un día de descanso obligatorio.
Pero hay empresas que insisten en que los empleados se presenten a laborar. ¿Qué pasa en esos casos? Aquí te contamos lo que la ley establece y cómo puedes defender tus derechos.
La ley es clara: el 16 no se trabaja
El artículo 74 de la Ley Federal del Trabajo enumera los días de descanso obligatorio, y entre ellos se encuentra el 16 de septiembre. Esto significa que, legalmente, no estás obligado a laborar ese día.
La Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (PROFEDET) lo explica sin rodeos: “Si se labora en día de descanso obligatorio, el trabajador tiene derecho a que se le pague, independientemente del salario que le corresponda por el descanso, un salario doble por el servicio prestado”.
En otras palabras, si te hacen trabajar, deben pagarte triple.
¿Y si tu jefe no cumple?
Si tu jefe o patrón te obliga a trabajar sin darte el pago correcto, la ley te respalda. Puedes acudir a la PROFEDET, que ofrece asesoría y representación gratuita a los trabajadores. La institución recuerda que “el trabajador cuenta con hasta un año para reclamar el pago de los días feriados trabajados”.
Además, la negativa del patrón puede derivar en sanciones administrativas, pues se trata de una violación directa a la Ley Federal del Trabajo.
¿Descanso compensatorio o pago?
Algunas empresas ofrecen “correr el día” y dar descanso en otra fecha. Sin embargo, este esquema no sustituye la obligación legal: el derecho exigible es el pago triple. El descanso adicional solo aplica si ambas partes lo acuerdan, pero no es un sustituto previsto por la ley.
En conclusión, el 16 de septiembre es un día de descanso obligatorio. Si tu jefe decide que trabajes, deberá compensarlo con un pago triple. Y si no cumple, puedes denunciar ante la PROFEDET. La ley está de tu lado y no hay margen para interpretaciones: tu esfuerzo en día feriado vale el triple.
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