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¿Cuáles son los derechos laborales de las mujeres embarazadas? Esto dice la ley

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¿Estás embarazada y trabajas? La ley en México protege tu salud y tu empleo con una serie de derechos que van desde licencias pagadas hasta pausas para lactancia.

La Suprema Corte y la Ley Federal del Trabajo (LFT) son claras: el embarazo no puede ser motivo de discriminación ni de pérdida de beneficios laborales. Aquí en el sitio de “El Mundo del Derecho” te damos los detalles.

Descanso obligatorio con goce de sueldo

El artículo 170 de la Ley Federal del Trabajo otorga a las mujeres embarazadas un descanso de seis semanas antes del parto y seis semanas después, con salario íntegro.

Además, es posible transferir hasta cuatro de las semanas prenatales al periodo posparto, si así lo decide la trabajadora con autorización médica.

“Durante el embarazo, las mujeres no deben realizar trabajos que impliquen la carga, arrastre o empuje de objetos pesados, así como labores que exijan esfuerzos considerables y signifiquen un riesgo para su gestación”, señala la Ley.

Pausas para lactancia

Tras la maternidad, las trabajadoras tienen derecho a dos descansos extraordinarios de 30 minutos cada uno durante su jornada laboral, para lactancia o extracción de leche, durante los primeros seis meses posteriores al parto.

En caso de que la empresa cuente con sala de lactancia, este derecho podrá ejercerse en dichas instalaciones.

La normativa también protege a las mujeres de ser asignadas a labores que pongan en riesgo su salud o la del bebé. No podrán realizarse actividades en lugares insalubres o peligrosos, ni trabajos en horarios nocturnos industriales.

Protección contra la discriminación

El marco legal es claro: ninguna mujer puede ser despedida ni sufrir modificaciones en sus condiciones laborales por motivo de embarazo. El incumplimiento de estas disposiciones constituye una violación a los derechos laborales y puede ser sancionado conforme a la ley.

Con estas medidas, la legislación mexicana refuerza la protección a la maternidad como un derecho laboral fundamental.

El trabajo de las mujeres embarazadas se respalda con condiciones que buscan garantizar un equilibrio entre la vida personal y la vida laboral.

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