¿A partir de qué edad se podrán jubilar los burócratas? Este es el cambio a la ley
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La presidenta Claudia Sheinbaum firmó un decreto que cambia por completo la ruta de jubilación para los empleados del Estado: a partir de 2025, la edad mínima para retirarse dejará de aumentar y comenzará a disminuir progresivamente hasta permitir que mujeres se jubilen desde los 53 años y hombres desde los 55 años en el año 2034.
El cambio, publicado el 24 de junio en el Diario Oficial de la Federación, revierte el esquema heredado de la reforma de 2007 que elevaba gradualmente los requisitos de edad para acceder a una pensión, incluso si los trabajadores ya cumplían con los años de servicio exigidos.
“Es necesario detener el incremento de la edad mínima de jubilación y establecer un nuevo esquema que reconozca el derecho a una pensión justa y digna”, establece el decreto.
Así quedará la nueva edad mínima para jubilarse
El nuevo calendario detiene el alza prevista y establece una reducción escalonada cada tres años. Este será el ajuste para quienes hayan cotizado al menos 30 años (hombres) o 28 años (mujeres) ante el ISSSTE y permanezcan en el régimen de pensiones original:
Este nuevo esquema aplica únicamente para quienes no hayan optado por los bonos de pensión y cumplan con el número de años de cotización establecidos en la ley del ISSSTE.
Reforma con enfoque social y perspectiva de derechos
El documento argumenta que el esquema vigente, instaurado desde 2010, fue regresivo y afectó la posibilidad de retiro oportuno, especialmente entre trabajadores con largas trayectorias en el servicio público. El nuevo enfoque, asegura el Gobierno, busca devolver progresividad al sistema y evitar que se prolongue innecesariamente la vida laboral.
Además, el decreto instruye al ISSSTE a establecer los acuerdos administrativos necesarios para aplicar estos cambios, mientras que los recursos requeridos se cubrirán con cargo al presupuesto federal aprobado por el Congreso.
La reforma responde a una exigencia que por años han sostenido sindicatos y organizaciones de trabajadores del Estado: recuperar condiciones más equitativas para jubilarse. Antes de la reforma de 2007, bastaba con cumplir los años de servicio sin necesidad de alcanzar una edad mínima.
Con este decreto, la administración de Sheinbaum rompe con una política impopular que obligaba a posponer la jubilación, y abre la puerta a que miles de servidores públicos accedan a una pensión en edades más tempranas, bajo el principio de justicia laboral.
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