Turista americana vandaliza Peña de Bernal: ¿qué castigo podría imponer la ley?
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Una turista de nacionalidad estadounidense fue captada en video mientras tallaba su nombre sobre la roca de Peña de Bernal, uno de los monolitos más altos del mundo y declarado Área Natural Protegida.
La acción, que también involucró a familiares suyos, generó indignación social y podría tener consecuencias legales conforme al marco jurídico mexicano. Aquí en el sitio de “El Mundo del Derecho” te damos los detalles al respecto.
Vandalismo en sitio protegido: lo que dice la ley
La Peña de Bernal, ubicada en el municipio de Ezequiel Montes, goza de protección tanto por su valor ambiental como por su relevancia cultural. El Código Penal Federal, en su artículo 418, establece que cualquier persona que dañe o destruya ecosistemas dentro de Áreas Naturales Protegidas puede recibir penas de entre seis meses y nueve años de prisión, así como multas que van de 100 a 3,000 días de salario mínimo.
Además, cuando se trata de un sitio con reconocimiento especial, como en este caso, las penas pueden aumentar hasta en tres años adicionales, y duplicarse las sanciones económicas.
A la par del daño ambiental, este tipo de actos también puede configurarse como un delito contra el patrimonio nacional, pues la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos establece penas de hasta 10 años de cárcel para quienes alteren o destruyan bienes considerados monumentos naturales, incluso si el daño no es irreversible.
La decisión está en manos del Poder Judicial
En caso de que las autoridades decidan judicializar el caso, corresponderá a un juez determinar si el acto fue doloso, imprudente o accidental, así como evaluar el valor del daño causado. Las sanciones finales podrían ser:
- Multas económicas proporcionales al daño.
- Reparación del daño ambiental o cultural.
- Prisión si se acredita intención o reincidencia.
Peña de Bernal no solo es un atractivo turístico; es un símbolo del estado de Querétaro y un espacio de identidad para comunidades locales. Su deterioro representa, además de una afectación ecológica, una falta de respeto al patrimonio compartido de los mexicanos.
Las autoridades estatales ya iniciaron una carpeta de investigación y advirtieron que, de comprobarse el acto vandálico, se aplicará la ley “sin distinción de nacionalidad”.
Es importante aclarar que la turista aún no ha sido detenida ni identificada oficialmente, pero el caso ha abierto el debate sobre la responsabilidad de los visitantes en espacios protegidos y la necesidad de reforzar la vigilancia y la educación ambiental.
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