Sheinbaum critica prisión migrante contraria al derecho internacional: “No son criminales”
[vc_row][vc_column][vc_column_text]
Desde una perspectiva de derechos humanos y legalidad internacional, la presidenta Claudia Sheinbaum se pronunció en contra de la apertura de una prisión para migrantes en Luisiana, Estados Unidos, denunciando que dicho centro será vigilado por caimanes y representa una violación al principio de no criminalización del fenómeno migratorio.
Durante su conferencia matutina de este martes, Sheinbaum expresó su rechazo al modelo carcelario adoptado por autoridades locales en EE.UU., al considerar que “las personas migrantes no son delincuentes”, y por tanto, no deben ser recluidas como si lo fueran. La mandataria subrayó que este tipo de medidas van en contra del marco jurídico internacional en materia de derechos humanos.
“Hay una prisión nueva, privada, en Luisiana, que está diseñada exclusivamente para migrantes. Lo más increíble es que alrededor de la prisión hay un lago con caimanes, y se justifica como una forma de evitar que las personas escapen. Eso no está bien, eso no está bien desde ningún punto de vista”, declaró.
Migración no debe tratarse como delito
Juristas y organismos internacionales han advertido en múltiples ocasiones que el derecho a migrar no puede ser penalizado, ya que la detención migratoria no debe confundirse con detención penal. México ha sostenido históricamente esta postura ante organismos como la ONU y la CIDH, por lo que el pronunciamiento de Sheinbaum refuerza la línea de defensa de los derechos fundamentales de las personas en tránsito.
La presidenta también reafirmó que su gobierno mantendrá una política exterior apegada a los derechos humanos, privilegiando el diálogo con el gobierno estadounidense, pero sin dejar de lado la denuncia de prácticas inhumanas o contrarias al derecho internacional.
“Vamos a tener una relación muy cercana con Estados Unidos, pero también tenemos que levantar la voz cuando estas cosas no son correctas. Nuestra posición es clara: la migración no es un crimen”, sostuvo.
Un precedente legal para la cooperación bilateral
La postura de México frente a centros de detención como el de Luisiana cobra relevancia en el marco de la cooperación bilateral en materia migratoria, especialmente a la luz de acuerdos recientes sobre movilidad laboral, refugio y retorno humanitario.
Además, expertos en derecho internacional han señalado que la construcción de prisiones migratorias privadas podría contravenir tratados como la Convención sobre los Derechos de los Trabajadores Migrantes y sus Familias, suscrita por México y otros países latinoamericanos.
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
