¿Puedes adoptar en México si estás soltero? Esto dice la ley
Cada 11 de noviembre se celebra el Día del Soltero, una fecha que invita a reflexionar sobre los distintos caminos de la vida independiente. Pero, más allá de los descuentos y las bromas en redes sociales, surge una pregunta de fondo que muchos se hacen en silencio: ¿una persona soltera puede adoptar en México o la ley lo impide?
La respuesta rompe mitos y revela que el amor y la estabilidad pesan más que el estado civil, aquí en el sitio “El Mundo del Derecho” te damos los detalles al respecto.
Ser soltero no es un impedimento legal
Contrario a lo que muchos creen, la legislación mexicana no prohíbe que una persona soltera adopte. El Código Civil Federal, en su artículo 391, reconoce el derecho de cualquier persona mayor de 25 años —sin importar si está casada, divorciada o soltera— a solicitar una adopción, siempre que acredite su idoneidad, solvencia económica y moral.
En otras palabras, la ley prioriza el bienestar del menor, no la estructura familiar tradicional. Por ello, el estado civil no representa una barrera, siempre y cuando el solicitante demuestre que puede ofrecer un hogar estable, afectuoso y seguro.
“El amor, la responsabilidad y la capacidad de brindar cuidado son más importantes que la situación civil”, ha señalado el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en diversas campañas sobre adopción.
Requisitos que deben cumplir las personas solteras
Aunque los requisitos pueden variar según cada entidad federativa, los lineamientos generales son similares en todo el país. Para adoptar, una persona soltera debe:
• Tener al menos 25 años de edad.
• Ser 17 años mayor que el menor que desea adoptar.
• Contar con recursos económicos suficientes para cubrir sus necesidades.
• Aprobar evaluaciones psicológicas, médicas y socioeconómicas.
• Presentar constancias de buena conducta y no tener antecedentes penales.
El proceso se realiza principalmente a través del DIF estatal o nacional, que valora el entorno familiar, la red de apoyo y las condiciones emocionales del solicitante antes de turnar el expediente a un juez. Una vez que se emite la resolución judicial, el adoptante adquiere todos los derechos y responsabilidades de la patria potestad.
Más que un trámite, una decisión de vida
La adopción, recuerdan especialistas en derecho familiar, no es un acto de caridad, sino una decisión profunda y permanente. En el caso de las personas solteras, las autoridades enfatizan que el compromiso debe ir acompañado de estabilidad emocional y una red sólida de apoyo.
En ese sentido, la ley mexicana reconoce la diversidad familiar y busca garantizar el interés superior de la niñez por encima de estereotipos sociales. La prioridad es que las niñas, niños y adolescentes crezcan en entornos donde reciban afecto, seguridad y oportunidades.
En conclusión, sí puedes adoptar en México aunque estés soltero, porque la ley no mide el amor en anillos, sino en compromiso familiar.

