¿Empates sin ganador? INE podrá dejar vacantes judiciales tras fallo del Tribunal Electoral
En una decisión clave para el desarrollo de la reforma judicial, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) confirmó que el Instituto Nacional Electoral (INE) tiene facultades para declarar vacante un cargo cuando exista un empate entre candidaturas, tal como ocurrió en algunas demarcaciones durante la reciente elección de jueces y magistrados.
“La autoridad electoral sí puede reconocer la existencia de una vacante cuando hay un empate en los resultados”, concluyeron los magistrados en sesión pública.
Sin embargo, precisaron que el INE no está facultado para convocar por sí mismo a una nueva elección, ya que esa tarea le corresponde al Senado de la República.
La magistrada presidenta, Mónica Soto, fue enfática al señalar que la Constitución es clara sobre las competencias.
“Si el Senado quiso reservarse la facultad para emitir la convocatoria, no puede ahora exigir que el INE asuma esa función”, sostuvo durante su intervención.
El fallo representó un rechazo al recurso presentado por el Senado, el cual pretendía invalidar el acuerdo del INE que permitía declarar vacantes por empate técnico. La Sala Superior determinó que los legisladores “carecen de competencia legal para impugnar decisiones del INE en estos casos”, por lo que se declaró infundada su solicitud.
Vacantes permanecerán hasta nuevo proceso electoral en 2027
El fallo también implica que las vacantes por empate permanecerán sin ocupar hasta la próxima elección judicial, programada para 2027, salvo que el Senado defina un procedimiento extraordinario.
“El INE no puede organizar elecciones extraordinarias si el Senado no emite una convocatoria formal”, detallaron los magistrados. En este contexto, las plazas sin definir quedarán en pausa hasta que el Poder Legislativo actúe.
Con esta resolución, el Tribunal Electoral delimita claramente las funciones de cada poder y marca un precedente para futuros procesos en el nuevo modelo de elección de jueces. Además, cierra el paso a interpretaciones políticas que buscaban responsabilizar al INE de tareas que no le corresponden constitucionalmente.
La decisión también refuerza la autonomía técnica del Instituto Nacional Electoral, al confirmar que puede actuar con base en sus atribuciones sin depender de interpretaciones externas. Así, mientras persistan los vacíos legales en torno a las elecciones judiciales, el INE mantendrá su papel operativo, pero sin asumir funciones legislativas o jurisdiccionales que excedan su mandato.