¿Por qué razón legal Fernández Noroña no puede reelegirse para presidir el Senado?
[vc_row][vc_column][vc_column_text]
Aunque Gerardo Fernández Noroña ha ganado protagonismo en el Senado, la ley es clara: no podrá repetir de inmediato como presidente de la Mesa Directiva.
La razón no es política, sino legal, y está escrita en la Ley Orgánica del Congreso General, que prohíbe la reelección consecutiva en este cargo. Aquí en el sitio de “El Mundo del Derecho” te damos los detalles.
La regla que impide la reelección inmediata
El marco normativo establece que “la Mesa Directiva será electa para un año legislativo y sus integrantes no podrán ser reelectos para el periodo inmediato”.
Esto convierte a la presidencia del Senado en un puesto rotatorio, diseñado para que cada año un legislador distinto encabece los trabajos parlamentarios.
El diseño legal de la Mesa Directiva busca evitar que una sola figura concentre el poder en la conducción del Senado. La rotación anual garantiza que distintos legisladores asuman la responsabilidad de dirigir las sesiones, representar a la Cámara Alta y coordinar el trabajo parlamentario.
La Ley Orgánica es clara: una vez concluido el periodo de un año, el presidente en funciones debe dejar el cargo y no puede ser electo nuevamente para el año inmediato.
Con ello, se fomenta la alternancia y se reduce el riesgo de que la conducción se convierta en un espacio de poder prolongado.
En septiembre, el Senado elegirá a quien suceda a Noroña, cumpliendo con la tradición y el mandato legal de rotación que rige a la Cámara Alta.
Lo que dice el propio Noroña
Fernández Noroña ha declarado públicamente que no tiene interés en prolongar su mandato, aunque la decisión final la tomará su grupo parlamentario.
“Prefiero regresar a mi escaño y seguir aportando desde ahí”, afirmó, descartando, por el momento, buscar la continuidad.
En semanas recientes, el legislador también señaló que no quiere “irse a una reelección para que me madreen”, en referencia a las críticas y presiones que, asegura, implica el cargo.
No obstante, ha dejado abierta la posibilidad de replantear su postura si así lo considera su bancada.
Sus declaraciones reflejan que, más allá de las limitaciones legales, existe una decisión política y personal de no insistir en repetir al frente de la Mesa Directiva.
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
