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Evolución hacia un derecho penal funcional

Por Jenny Hernández

Cuando estudiamos la licenciatura en Derecho los profesores fueron demasiado enfáticos en la necesidad de memorizar autores, teorías, fechas, entre otras cosas. Adquirimos una capacidad impresionante para manejar el derecho sustantivo, desde su filosofía pura hasta los conceptos más pormenorizados en derecho procesal. Cuando decidí especializarme y ejercer en materia penal sucedió lo mismo, con la diferencia de que con mayor conciencia de ésta, pude adentrarme y conocer todas sus formas y manifestaciones; entonces, mi amor por el derecho penal se convirtió en pasión cobijada por el más puro iusnaturalismo.

Por lo tanto, el derecho penal conlleva per se la necesidad de evolucionar, incluso de manera más rápida que las sociedades, ya que su finalidad, a través de los diversos dispositivos como normas prohibitivas, será inhibir, mediante la pena, conductas que dañen bienes jurídicos de otros miembros de una sociedad. Coincido en que lo anterior se lee muy bien, no obstante, es una realidad que las diversas modalidades al delinquir no solamente ya nos alcanzaron, sino que hemos sido rebasados;

Hoy en día aún carecemos de conocimiento concreto sobre ciberdelitos y de las herramientas para una debida investigación de los mismos.

Resulta un desafío el argumentar que se satisfacen los elementos del tipo, ya que hay conductas tan poco claras que llegan a ser consideradas como elementos subjetivos específicos. Desafortunadamente, al mencionar lo anterior no solamente me refiero a delitos especiales, sino a todos aquellos contra la sexualidad, como el abuso y acoso; patrimoniales, como los cada vez más frecuentes fraudes ejecutados digitalmente; o aquellos económicos/informáticos como la clonación de tarjetas bancarias y cargos no reconocidos. Delitos que representan el mayor porcentaje de cifra negra de nuestra localidad.

Esta evolución autoaplicativa -en una comparación argumentativa a símil-, también ayudará a ejercer obligaciones y deberes bajo el más estricto respeto a los derechos humanos de las partes. Agilizará las revisiones que impliquen perspectiva de género, interculturalidad o interseccionalidad; asimismo, contribuirá a que las revisiones, y procesos en general, se realicen de manera más rápida y ágil.

Es importante destacar que solamente lograremos la funcionalidad del sistema de justicia penal si comprendemos que este derecho ha evolucionado, y los alcances y obligaciones que eso conlleva. Abogadas y abogados que hayamos detectado estas deficiencias, que hayamos hecho valer estas carencias a favor de nuestros representados, tenemos lo necesario para proporcionar una nueva visión al Poder Judicial de la Ciudad de México. Esto, sin temor a equivocarme, cambiará la dirección del acceso a la justicia, sustituirá la manera miedosa por la oficiosa para hacer valer los Derechos Humanos de las partes, erradicará la clásica idea de “es mejor que se resuelva en Amparo”. Erradicar en definitiva el miedo al cambio y manera de impartir justicia.

Evidentemente con lo anterior no pretendo transmitir un mensaje erróneo, como el que estoy calificando la actuación de las autoridades -mismas que conozco y reconozco-, sino transmitir al lector y votante, el como si podremos ayudarles. Transmitir al lector y votante la importancia y trascendencia histórica que tienen en sus manos de elegir a sus autoridades.

Lo redactado en el párrafo inmediato anterior es muy importante, ya que no obstante al hecho histórico que vivimos destaca la renuencia de las y los ciudadanos. Cuando hablo de renuencia no solamente me limito a esa mentalidad difundida a no votar, sino también a esos profesionales en Derecho que parecen no recordar las múltiples ocasiones en que se quejaron de ese mismo Tribunal, que sin importar la carrera judicial contendieron a los concursos abiertos de oposición para ocupar cargos de jueces y magistrados –ante la implementación del nuevo sistema de justicia penal y la necesidad de contar con personal que proporcionaran a las demás autoridades visión, bases y herramientas para enfrentar dicho cambio de manera exitosa-.

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